¡Botellón!

Hagamos un macrobotellón hispano el domingo por la noche, pero para celebrar que después de las elecciones, aún hay esperanza.
Y nada de kalimocho loko.
Vinito del bueno.
Para empezar la Reconquista.
Somos más elegantes que esa patulea de progres de izmierda.
Tenemos más clase.
Amamos a España.
Odiamos a ETA.
Admitimos las discrepancias democráticas.
No nos gustan los traidores.
Creemos que esto aún tiene remedio.
Un solo garbanzo no jode un cocido.
¡Desperta ferro!
